Raíces urbanas hacen frente al cambio climático
Nueva York recientemente completó un esfuerzo de plantar otro millón de árboles— esta vez para ayudar a enfrentar el cambio climático.
Por Jenny Rogers, Editor Asociado y Escritor, Revista Nature Conservancy | Verano 2019
Para una ciudad famosa por estar abarrotada y sin dormir, Nueva York tiene una sorprendente cantidad de retiros tranquilos y sombreados. Parques y patios de recreo cobijados por sombra se extienden por Riverside Drive, cementerios forman un cinturón entre Broohlyn y Queens, incluso hay un bosque primario en la punta Norte de Manhattan. Más de 8.6 millones de personas viven en la ciudad, pero 7 millones de árboles crecen junto a ellas.
Impulsadas por la preocupación por el cambio climático, ciudades a través de los Estados Unidos se han comprometido con hacer crecer lo que los diseñadores llaman el bosque urbano, pero pocos lo han hecho de una manera tan exitosa como Nueva York. En 2015 el Departamento de Parques y Recreación de la Ciudad de Nueva York y la organización sin fines de lucro local New York Restoration Project completaron un proyecto de ocho años para plantar 1 millón de árboles.
Nueva York no siempre ha abrazado a los árboles. Los reformistas locales se adelantaron a su tiempo cuando en el siglo XIX sugirieron que los árboles promueven la salud pública, dice la historiadora del paisaje Sonja Dümpelmann en Seeing Trees. En 1870, un médico abogó por plantar árboles para "nivelar la temperatura" en la ciudad, después de notar una correlación entre el promedio semanal de temperaturas más alto y las muertes entre niños pequeños por "enfermedades diarreicas". Por 1930, los diseñadores urbanos habían seguido el ejemplo de Europa y comenzaron a plantar el robusto plátano de Londres en casi todas partes—un árbol foráneo para una ciudad hecha de inmigrantes.
Mientras Nueva York se enfrenta a un nuevo desafío climático, los árboles de la ciudad son aún más importantes, dice Emily Nobel Maxwell, quien dirige el programa de The Nature Conservancy en Nueva York. La ciudad ya está viendo olas de calor más intensas y tormentas más frecuentes, ella dice, y tendrá que seguir plantando y cuidando su bosque urbano. Los árboles refrescarán el aire y ayudarán a absorber los torrentes de lluvia.
Y los árboles simplemente hacen la vida de la ciudad más placentera. "Yo pienso en el clima", dice Maxwell. "Pero también pienso en 365 días del año, en lo que se siente caminar en una calle llena de árboles hermosos".
Desplázate a través de las fotografías de los árboles de la Ciudad de Nueva York por Diane Cook y Len Jenshel.
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