Informe Anual 2020

Producir agua y alimentos de forma sostenible

La naturaleza trae alimentos a nuestra mesa y agua a nuestros grifos. El camino que tenemos por delante requiere que innovemos ahora.

Campo de cebada
Campo de cebada El cambio a cultivos que ahorran agua -como este campo de cebada en Arizona- puede ayudar a proporcionar alimentos y agua de forma sostenible. © Andrew Kornylak

Un agricultor de Arizona hace el cambio a cultivos menos sedientos

TNC está demostrando que una elección más inteligente de cultivos en el árido Oeste puede proporcionar más agua tanto para las personas como para la naturaleza.

En el Valle del Río Verde (enlace en inglés) de Arizona un giro sensato en la gestión de la tierra ha significado grandes cambios allí donde era preciso: en las aguas del río Verde, que son vitales. Con un recorrido de 300 km desde las tierras altas de la parte central de Arizona, el río Verde y sus márgenes llenos de sauces y álamos son una fuente de vida. El río riega además los cultivos de secano y proporciona agua potable a las comunidades. Recientemente ha sido tan sobreexplotado que algunos tramos se han secado durante el verano, amenazando la viabilidad de algunas tierras de cultivo y la supervivencia de una rica diversidad de vida salvaje, incluyendo dos especies de peces en peligro.

Una persona extiende una cinta de medir hasta el otro extremo de un arroyo.
Medición de arroyos Alineado con sauces y álamos, el río Verde de Arizona corta un camino exuberante a través del desierto. © Andrew Kornylak

Para abordar el problema, TNC junto con socios locales, empresarios y agricultores, propuso un cambio que parece capaz de conseguir lo imposible: ahorrar la tan preciada agua y a la vez plantar cultivos comercializables, promoviendo el crecimiento de un nuevo sector en la economía local. De forma resumida, TNC trabajó con el mayor productor agrícola de la región para cultivar cebada, un cereal que consume la mitad de agua que otros cultivos como la alfalfa y el trigo. Y TNC ayudó a subvencionar una nueva empresa de procesamiento de la cebada para la industria cervecera.

En solo tres años, el cambio a los cultivos de cebada maltera de alta calidad ha supuesto un gran éxito para los productores de cerveza locales, con un ahorro de unos 1 609 millones de litros (425 millones de galones) de agua —una cantidad suficiente como para llenar más de 600 piscinas olímpicas— y ha mantenido el cauce del río Verde.

Alivio para los arrecifes

Aprovechar el descenso en las ventas de ostras para impulsar la restauración de los arrecifes en EE.UU.

En 2020, TNC ayudó a crear un programa innovador para restaurar los arrecifes de ostras y apoyar a los cultivadores afectados por la disminución de las ventas durante la pandemia.

El proyecto, dirigido por TNC y The Pew Charitable Trusts, intervino para crear un nuevo mercado para más de 100 ostricultores que se vieron en apuros cuando el COVID-19 cerró restaurantes y la demanda de ostras se desplomó. "Fue un enorme salvavidas", dice Laura Brown, una criadora de ostras de New Hampshire. 

Los productores de mariscos de siete estados pueden vender el excedente de sus saludables ostras al proyecto llamado SOAR (enlace en inglés) —Supporting Oyster Aquaculture and Restoration (Apoyo para la acuicultura de ostras y la restauración)— que luego las trasplanta a arrecifes en restauración cercanos. Una sola ostra puede filtrar 190 litros (50 galones) de agua en un día, y un arrecife completo de ostras puede ser esencial para la salud de bahías y estuarios. Las empresas productoras de ostras —tanto las empresas familiares como las de reciente aparición— ofrecen estos beneficios ecológicos e incluso, a menudo, ayudan a las economías rurales. 

Llevar a cabo la misión de SOAR de comprar 5 millones de ostras a lo largo de un periodo de dos años significa que los productores serán capaces de mantenerse a flote a la vez que los esfuerzos a largo plazo para restaurar los arrecifes locales obtienen un valioso impulso.

Protección de la Bahía de Bristol de Alaska 

TNC mantiene su compromiso de proteger de forma permanente las tierras y aguas de la bahía frente a la construcción de una mina en las cabeceras de la cuenca.

En la Bahía de Bristol, la forma tradicional de vida de los pueblos nativos de Alaska siempre se ha basado en el agua limpia y el retorno anual del salmón salvaje. La cantidad de estos peces ronda las decenas de millones, más que en ningún otro lugar del planeta, convirtiendo a la Bahía de Bristol en la última y mayor esperanza (enlace en inglés) para conservar una cultura y economía vinculadas directamente a la captura sostenible del salmón salvaje. Sin embargo, sus impresionantes ríos, lagos y hábitats de osos y caribúes carecen todavía de guardas de seguridad permanentes que los protejan de las amenazas, como por ejemplo la mina Pebble, y esto significa que su futuro no está completamente a salvo. 

Quote: Steve Cohn

Las antiguas tradiciones del salmón salvaje de la Bahía de Bristol siguen vivas y fuertes, de momento. Pero no podemos permitirnos caer en la autocomplacencia. Lo que hagamos ahora, en este momento, determinará el futuro.

Director en Alaska de The Nature Conservancy

Los científicos de TNC apoyan desde hace tiempo a las organizaciones indígenas locales y la industria pesquera comercial sostenible de la región, que en 2020 consiguieron de forma conjunta detener temporalmente la mina en una campaña sostenida que sigue actualmente en pie. Gracias a esta amplia coalición, TNC aprovecha esta victoria para abogar por una legislación permanente de protección junto con inversiones claves para reforzar las economías locales y la autoridad de los indígenas, todos ellos pasos transformadores para construir un futuro mejor para la naturaleza y las personas vinculadas a la Bahía de Bristol.

Pescadores comerciales recolectan salmón de una red de pescar
Naknek Annette Caruso, Hans O-Apokedak, y Greg Andrew III sacando peces de las redes de su barco en la Bahía de Bristol, frente a la costa de Naknek, Alaska. © Brian Adams
Docenas de tiras de salmón ahumado cuelgan de un techo de madera
Salmón ahumado Tradiciones ancestrales viven en las comunidades indígenas, donde el regreso del salmón reúne a la gente para recoger el pescado y conservarlo en ahumaderos de patio. © Brian Adams
Naknek Annette Caruso, Hans O-Apokedak, y Greg Andrew III sacando peces de las redes de su barco en la Bahía de Bristol, frente a la costa de Naknek, Alaska. © Brian Adams
Salmón ahumado Tradiciones ancestrales viven en las comunidades indígenas, donde el regreso del salmón reúne a la gente para recoger el pescado y conservarlo en ahumaderos de patio. © Brian Adams

Ayudando a salvar la Amazonía

Una aplicación de teléfono móvil ofrece una vía de salida para los agricultores.

En la Amazonía brasileña, los productores familiares a pequeña escala son responsables de aproximadamente un tercio de la pérdida total de selva tropical al cortar árboles para crear zonas agrícolas y praderas para el ganado con el fin de mejorar su subsistencia y sus ingresos. Pero desde 2012, TNC y el Gobierno del estado de Pará han proporcionado asistencia técnica y formación para estimular a los agricultores a cultivar árboles de cacao, el origen del chocolate, con el fin de reforestar las tierras degradadas y proporcionar una fuente más sostenible de ingresos. Sin embargo, el año pasado cuando se acercaba la época de la cosecha, la COVID-19 azotó Brasil (enlace en inglés); como era muy peligroso hacer una formación presencial se recurrió a una aplicación de mensajería social basada en la telefonía móvil para divulgar videos de capacitación a unos 250 agricultores, justo a tiempo para ayudar con la cosecha.

Tres frutas de cacao cuelgan de la rama de un árbol
Vainas de cacao Recolectar vainas de cacao para producir chocolate puede contribuir a la reforestación de la selva amazónica y proporcionar ingresos estables para los pequeños agricultores. © João Ramid